Hola! Mi nombre es Marian, soy la diseñadora y creadora de esta pequeña marca de accesorios de diseño. Comencemos por el principio de todo:
De donde nace CIP.?
CIPRIANA es ella. Mi abuela. Mi estrella en el cielo y mi gran referente. Cipriana y Manuel fueron mis abuelos maternos y aunque él partió muy joven, tuve la suerte de disfrutar a mi abuela muchos años!
Cuando pensaba que contar en estas lineas, inevitablemente mire a mi hijo de 5 años, que jugaba con sus juguetes y recordé inmediatamente mi vida a esa edad con mis abuelos.
CIPRIANA era una mujer simple, sencilla de la ciudad de San Juan capital de la Provincia. Vivía en la casa mas humilde de la cuadra. No le sobraba nada, todo lo contrario. Uno tiene la tendencia siempre de recordar esas cosas que nos marcan en la vida y yo siempre tuve el recuerdo de haber crecido con muchas carencias, comparando mi infancia con los demás niños que conocía. Hasta que me convertí en mama y me toco a mi, criar un niño.
Y es que parece que tuvimos un velo que de repente se corre para siempre cuando nos convertimos en padres.
CIPRIANA olìa a crema Pond`s. Era el único cosmético que le vi en la vida. Usaba vestidos con flores siempre. Nunca uso pantalones, ni hablar de zapatillas. Solo usaba zapatos con un mini taco chino.
Tenia una vida simple, pero, trabajaba muchísimo en la casa. Ella hacia el pan, caserito y en horno de barro. Lo cuento y puedo sentir el olor de ese pan calentito que desayunaba con dulce de leche que me compraba, suelto por supuesto!
Tenia en su casa gallinas ponedoras, así que los huevos eran caseritos. Y mi tarea asignada, todas las mañanas luego de desayunar (envidienme!) era ponerme un delantal y ahí cargar a los pollitos para llevarlos al patio a tomar sol!! Mi abuela hacia los tucos mas sabrosos del mundo. Y los ñoquis mas perfectos, en la mesa larga de su cocina podías encontrar producciones industriales hechas por ella solita y bueno su ayudante, yo!
A la hora del postre venia lo complicado, ella me mandaba a buscar lo que había y eso dependía de la temporada. Porque la casa era humilde pero alguien, no se si mi abuelo o mi tio se había ocupado de sembrar en el fondo todo tipo de plantas u árboles frutales!! Ciruelas, blancas y negras. Duraznos blancos y amarillos. Granada, naranjas y mandarinas. Higos, y por supuesto uvas blancas y negras. Al parecer, crecí comiendo los mejores postres con sabores que ya no se encuentran, eso se los puedo asegurar!
Mi abuela CIPRIANA fue mi segunda mama, yo siempre sentí que debía rendirle un pequeño homenaje a tanto amor incondicional.Y aquí esta. Por cuestiones de marca acotamos su nombre a CIP. Pero esto es, su esencia y valores. Enseñarme a hacer con "poco", muchísimo. A resolver, a crear magia con humildad. Gracias abuela. Este emprendimiento va dedicado a vos. CIPRIANA... CIP forever. Espero estar a la altura.